ibi fabula
Como estética de la brevedad, y por sus relaciones con la poesía, nos hacemos eco aquí de algunos cuentos de autores actuales. Para presentarlos, nada mejor que la voz autorizada de tres grandes maestros del género.
Un cuento es significativo cuando quiebra sus propios límites con esa explosión de energía espiritual que ilumina bruscamente algo que va mucho más allá de la pequeña y a veces miserable anécdota que cuenta (…) Todo cuento perdurable es como la semilla donde está durmiendo el árbol gigantesco. Este árbol crecerá en nosotros, dará su sombra en nuestra memoria.
Julio Cortázar
Es probablemente una acción, un gesto del personaje diferente al resto de los gestos y acciones de la historia, el que señala dónde descansa el corazón del relato. Debe ser una acción o un gesto totalmente correcto y, al mismo tiempo, totalmente inesperado; debe atravesar al personaje y estar más allá de él; debe sugerir, a la vez, el mundo y la eternidad (…) Debe ser un gesto que de algún modo esté en contacto con el misterio.
Flannery O´Connor.
Y ésta es siempre la estética del relato, tenga media o mil páginas, y se denomine como se denomine: la estética de lo pequeño y fragmentario, particular y cotidiano –sin la mentira del argumento, diría Joyce–, lo visto y oído, o ya contado pero que nos concierne en cuanto hombres, porque es hermoso y terrible, o lleno de alegría y todavía no existe. Porque es memoria de hombre que murió bajo el látigo o en la esperanza y su vida está inconclusa, exigiendo la compensación ética de su narración.
José Jiménez Lozano.