La poesía siempre sucede en un ámbito de relación personal entre el lector y el poema. Sin embargo, la fuerza de esta relación nos anima a disfrutarla acompañados. De hecho, pocas cosas resultan más satisfactorias para los apasionados del género que disfrutar de la expresión pública de la poesía, fenómeno que, además, goza de un excelente estado de forma en la actualidad. Así, los recitales, la poesía teatralizada y las performances proliferan. Además, éstos, a menudo, se graban y se cuelgan en ese gran ágora virtual que es la Red.