Hoy quiero estar contento
Por Pablo Luque Pinilla
Algunos profesores del Colegio Internacional Kolbe me pidieron que tratara de explicar el lema de hace algunos años, «Hoy quiero estar contento», a los niños de tercero de primaria del centro mediante un poema. A priori no veía claro cómo hacer algo que enganchara a los niños, sin dejar fuera a padres y profesores. Por otro lado, en general, los niños de segundo ciclo de primaria es difícil que entren por sí mismos en un poema que no provenga de sus libros de texto, por mucho que dicho poema tenga los elementos propios de la literatura para pequeños, pues necesitan ser acompañados por alguien que se lo presente. Al final, me pareció que la idea de un vídeo era lo mejor, pues eso introduciría a todos más naturalmente en la dinámica de la poesía.
Por otro lado, vislumbré que era una buena ocasión para implicar a la familia, que, a la postre, fue lo mejor. De esta manera, los niños vieron por sí mismos qué es eso que tanto atrae a su padre delante de la pantalla del ordenador. En definitiva, una forma como cualquier otra de hacerles partícipes del afecto de su padre por la poesía.
Hasta ahora, este vídeo no había trascendido el umbral del canal Youtube del colegio. Aprovecho, no obstante, el espacio dedicado a la poesía infantil de este décimo número de Ibi Oculus para ofrecerlo fuera de dicho contexto.
En la página del Colegio Internacional Kolbe se explican, con las siguientes palabras, algunos de los pormenores de este poema/stop-motion:
A principios de curso, cuando lanzamos el lema de este año, “Hoy quiero estar contento”, pedimos a Pablo Luque Pinilla, poeta y padre del Colegio Internacional Kolbe, que compusiera un poema con él. Como buen artista, nos pidió tiempo, y en Semana Santa nos ha sorprendido con un vídeo que va mucho más allá de nuestras expectativas.
“Ha sido precioso implicar a mis hijos en el trabajo. ¡Estaban entusiasmados! De alguna manera sentía la necesidad de que pudieran asomarse un poco a mi pasión poética en primera persona, y ese deseo ha condicionado la decisión de hacer un vídeo-poema. Ellos deben percibir que la poesía les da cosas, no sólo que secuestra a su padre de cuando en cuando”, nos explica Pablo.
En el vídeo se puede ver el día a día de una familia, y especialmente la relación padre-hijo: la preparación para ir al colegio, el desayuno entre prisas, el camino a clase, y, después, la conversación al salir de clase: “¿Qué tal el día? ¿Qué tenéis de tarea?”. Pero ¿qué es lo realmente importante? ¿Qué es lo que le da sentido a la rutina diaria? ¡Estar contentos!